Tres funcionarios de la Alcaldía de Santa Cruz renuncian a pedido de Fernández

Con el argumento de evaluación y la "salud" de su gestión, el alcalde Jhonny Fernández pidió a su gabinete de secretarios y directores. presentar sus cartas de renuncia.

Luego de la petición que hiciera el alcalde de Santa Cruz, Jhonny Fernández, a sus colaboradores, hubo tres renuncias seguidas la tarde de este jueves. Primero renunció la secretaria de Desarrollo humano, Adriana Pedraza; luego la de Cultura y Turismo, Sarah Mansilla, y también el de Tránsito y Transporte, José Carlos Cuellar.

Pedraza explicó de esa forma su decisión: "El motivo de mi renuncia obedece a cuestiones personales (…), siempre yo firme a mis convicciones, siempre al servicio de la población desde el primer momento, estuve yo trabajando por nuestro municipio, por la gente que necesita".

La ahora exfuncionaria señaló su incomodidad al seguir asumiendo este puesto. "Hay situaciones que incomodan y es momento de dar un paso al costado, (…) ya no me sentía cómoda", contó.

El alcalde Fernández confirmó que la mañana de este jueves pidió a sus secretarios y directores "que pongan a disposición sus cargos" para hacer una evaluación y ajustes, como "siempre". "Esto hay que hacerlo por el bien y salud de nuestra gestión, para darle una dinámica favorable en lo que son programas y proyectos en nuestra ciudad", justificó en un video difundido en redes sociales.

Mansilla, secretaria municipal de Cultura y Turismo, también anunció su dimisión. "Manifestarle mi aprecio y profundo agradecimiento por la confianza que tuvo en mi persona para ejercer este cargo tan importante relacionado al arte, cultura y turismo de nuestro municipio", escribió en el segundo párrafo de su carta.

Sin esperar mucho, el secretario de Tránsito y Transporte, José Luis Cuéllar, también presentó su carta de renuncia sin brindar mayores detalles.

La crisis de gabinete de Fernández sucede al paro de 48 horas contra la postergación del Censo de Población y Vivienda hasta 2024, que propició la llamada Comisión Interinstitucional por el Censo, de la que formaba parte el alcalde, y las fuertes divergencias políticas de éste con el gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, quien ya tenía cuotas de poder en el gobierno local desde la gestión de Angélica Sosa.