Un grupo de personas hostigó este lunes el domicilio del alcalde de Santa Cruz, Johnny Fernández, donde se protagonizó momentos de tensión con la detonación de artefactos explosivos y el arranque veloz de una camioneta blanca sin placas.

En calles cercanas, efectivos de la Policía decomisaron un vehículo particular sospechoso de haber participado de estos hechos de violencia y en su interior se hallaron armas, en medio del paro cívico de 48 horas que exige que el Censo se realice en 2023.

De este último hecho, cuatro personas que estaban en el coche de color rojo fueron detenidas con fines investigativos. Según un reporte de la red Unitel, en la pesquisa se encontró una bazuca y otros artefactos de dudosa procedencia.

El auto fue llevado a instalaciones de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), donde peritos realizaran la investigación.

"Los investigadores están verificando las cámaras de seguridad que estaban grabando la calle Ibérica", se dijo en el medio televisivo. También se reportó que las personas detenidas son parte de la Unión Juvenil Cruceñista (UJC).

El alcalde Fernández se quedó a dormir en sus oficinas, junto a su personal, para no participar en el paro, tras su rechazo a la medida de presión que es impulsada por un Comité Interinstitucional bajo la batuta del gobernador Luis Fernando Camacho, el Comité pro Santa Cruz y el rector de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (UAGRM), Vicente Cuéllar.