Gustavo Petro es posesionado como el primer presidente de izquierda de la historia de Colombia

Mientras, Francia Márquez, de 41 años, se convierte en la primera mujer afrodescendiente en asumir la Vicepresidencia.

Colombia inicia esta jornada un nuevo ciclo político con la investidura de Gustavo Petro como presidente de la nación, el primer mandatario de izquierda en 200 años de historia republicana y un exguerrillero que comandará a las Fuerzas Armadas.

El político, de 62 años, que llegó a la presidencia luego de obtener más de 11 millones de votos con su fórmula vicepresidencial; la líder ambientalista Francia Márquez, de 41 años —primera mujer afrodescendiente en asumir el cargo —, ha significado un cambio de paradigma en el país latinoamericano, tradicionalmente gobernado por las élites y sectores de la derecha.

El Pacto Histórico alcanzó la mayoría en las regiones de Caribe, Pacífico y Amazonía, que bordean parte del mapa de Colombia, y que están conformadas por poblaciones afrodescendientes e indígenas, las más golpeadas por la violencia, la pobreza, la exclusión, el desplazamiento forzado y la discriminación.

Petro prometió una nación con menos desigualdad, que garantizará los derechos de todos sus ciudadanos —especialmente de los más vulnerables— y es precisamente de estos lugares 'olvidados' de donde provino la votación decisiva para su triunfo.

Su victoria trae consigo altas expectativas con su objetivo de llevar adelante un cambio del modelo económico, que incluye una reforma tributaria, en el agro, la producción energética, la policía, las pensiones, la recaudación de impuestos y sobre todo el plan para lograr el anhelado Acuerdo Nacional por la paz.

Sin embargo, en los cuatro años de mandato que tiene por delante, deberá enfrentar una serie de desafíos que quedaron pendientes durante el gobierno de Iván Duque. La creciente violencia que ha cobrado la vida de 801 líderes comunitarios y 183 exguerrilleros desde 2019, la inflación más alta de las últimas dos décadas, y la búsqueda de consensos en una nación dividida. (RT)