Tras la amenaza de paro de la Cumbre del Censo en Santa Cruz, el Gobierno responsabilizó al gobernador Luis Fernando Camacho de no haber defendido su posición en el Consejo Nacional de Autonomías, donde se definió aplazar el censo hasta el 2024, y cuestionó que se atribuya la representación de los bolivianos.

Los ministros de Obras Públicas, Édgar Montaño, y de Salud, Jeyson Auza, coincidieron en criticar el accionar de Camacho, sobre todo porque no acudió a la cita del Consejo Nacional de Autonomías que el martes decidió en consenso con ocho de nueve gobernadores y la representación de los alcaldes aplazar hasta el 2024 el censo previsto para noviembre.

"Yo quisiera saber quién es el gobernador, yo quisiera saber quién le ha dado el derecho de hablar a nombre de todos los bolivianos, ese irresponsable gobernador debería haber estado acá en el Consejo Nacional de Autonomías. Como siempre cuando se lo convoca a reuniones de salud o a planificar el desarrollo del país nunca está", cuestionó Auza.

En la Cumbre Departamental por el Censo de Santa Cruz se dio un plazo de cinco días para abrogar el decreto que aplazó hasta el 2024 el censo de población y vivienda. De no atenderse esa y otras demandas, el lunes 25 de julio se cumplirá un paro cívico de 24 horas.
Camacho planteó encaminar un paro progresivo de actividades en la cita donde estuvo el alcalde Jhonny Fernández, el dirigente cívico Rómulo Calvo y otras autoridades.

Montaño recordó que la reprogramación del empadronamiento fue una decisión de consenso.

"Primero que asista a las reuniones del Consejo Nacional de Autonomías, donde se ha decido por unanimidad de ocho gobernadores y alcaldes que se va a ampliarse el plazo, por tanto que no sea chachón, que no sea faltón, que asista donde tiene que ir", reclamó en respuesta al plazo y amenaza lanzada por la dirigencia de Santa Cruz.