Defensa de Áñez ve que la Fiscalía debe pedir detención de Camacho e indagar a Rivero y Salvatierra
El abogado Alain De Canedo recordó que la expresidenta Jeanine Áñez fue incluida en el caso Golpe de Estado I en marzo y ya está en la cárcel, situación que no ocurre con Camacho, quien es el principal acusado
Para la defensa de la expresidenta Jeanine Áñez, la Fiscalía debe imputar y pedir la detención preventiva del gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, por el caso Golpe de Estado I e investigar a las exlegisladores del MAS Adriana Salvatierra y Susana Rivero por su participación en las reuniones en la Universidad Católica Boliviana (UCB) en noviembre de 2019.
Camacho fue citado a declarar para el 12 de julio en la Fiscalía de Santa Cruz. "Con la convocatoria de Camacho, el Ministerio Público tendría que imputarlo y pedir en toda caso la detención preventiva en similitud o al menos en disimulo con lo que se hizo con Áñez", consideró Alain De Canedo, abogado de la expresidenta.
En la denuncia interpuesta por la exdiputada del MAS Lidia Patty el principal acusado es Camacho, quien lideró las protestas cívicas de 2019 que, junto al motín policial y la "sugerencia" militar de dejar el cargo, acabaron con la renuncia del expresidente Evo Morales. El gobernador cruceño aseguró que acudirá a la citación.
Áñez es procesada en este caso del Golpe de Estado I por los delitos de terrorismo, sedición y conspiración. Ya tiene una sentencia de 10 años de cárcel en el caso Golpe de Estado II que tiene que ver con la toma de la Presidencia del Senado, que luego le permitió hacerse del poder como resultado de la reunión de cívicos y políticos de oposición en la UCB.
De Canedo cuestionó que Camacho no haya sido convocado a declarar antes, mientras que Áñez ya está en la cárcel por ese caso, siendo que recién en marzo de 2021 fue incluida en el proceso.
También planteó que deberá investigarse a las exlegisladoras Rivero y Salvatierra, porque como lo reveló el expresidente Jorge Quiroga con mensajes de chat estuvieron en las reuniones de la UCB. Rivero respondió que en esos mensajes no se habla de la sucesión de Áñez, sino de "amedrentamiento a mi persona, de la vida de mi familia, del avión mexicano y la seguridad de Evo".