Ante las largas filas de camiones y buses en los surtidores para comprar diésel, el ministro de Hidrocarburos, Franklin Molina, reconoció que hubo "entregas demoradas" y que se trabaja en resolver los inconvenientes, aunque también advirtió que la demanda inusual se debió a rumores alejados de la verdad de un incremento en el precio de carburantes. "YPFB garantiza el normal suministro de combustibles en el país, cuando nos referimos a combustibles hablamos de diésel y gasolina", afirmó y aseguró que "tanto el precio de la gasolina como el diésel están totalmente garantizados y bajo una política de Estado nacional de garantizar los precios". Molina recordó que el contexto internacional que se vive en Europa con el conflicto bélico en Ucrania es una de las causas para la falta de carburantes y que países del mundo son afectados. Molina apuntó que también los bloqueos de la pasada semana en El Alto, Tupiza y en Chile, además del lado argentino, afectaron la logística del abastecimiento. "Estas situaciones han generado unas complicaciones en cuanto a toda la zona norte del país, pero trabajamos con la ANH para que no falte combustible en el país", afirmó. Asimismo, declaró que la producción de diésel será incrementada en 105% para abastecer de una manera normal a la población y advirtió que si existió falta de carburantes se debió a "entregas demoradas" por incumplimiento también de algunos proveedores. Molina pidió ante cualquier anormalidad denunciar ante la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) para iniciar los procesos que correspondan.