La CIJ clausura alegatos orales con insistencia chilena de rechazo a demandas de Bolivia

La agente de Chile dijo que su país "se aproximó a Bolivia para intentar alcanzar un acuerdo". La CIJ confirmó que en su "debido tiempo" notificará a los agentes sobre la fecha del fallo.

La Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya cerró este jueves la fase de los alegatos orales, que empezó el 1 de abril, por el estatus y el uso de las aguas del Silala, con la réplica de Chile a las contrademandas de Bolivia, en la que la defensa del vecino país insistió que todos los pedidos del Estado Plurinacional deben ser rechazados por dicho tribunal.

En la primera demanda reconvencional, Bolivia solicita a la Corte declarar que tiene soberanía sobre los canales artificiales y mecanismos de drenaje en el Silala que se encuentran en su territorio, y que tiene derecho a decidir si los mantiene y cómo.

En la segunda, Bolivia pide que la CIJ declarar que tiene soberanía sobre el canal artificial de las aguas del Silala, que se organiza, mejora o produce en su territorio, y que Chile no tiene ningún derecho adquirido sobre ese caudal artificial.

Y, en la tercera, pide que la Corte declarar que cualquier solicitud de Chile a Bolivia para la entrega del caudal mejorado del Silala, así como las condiciones y modalidades de la misma, incluyendo la compensación a pagar por dicha entrega, está sujeta a la celebración de un acuerdo con Bolivia.

En ese sentido, la agente chilena Ximena Fuentes dijo que "la forma de proceder de Bolivia explica por qué Chile acudió a la Corte para tener seguridad jurídica respecto a la condición y uso de las aguas del Silala".

Pues, "cuando quedó claro (…) durante las presentaciones escritas que Bolivia reconocía que el río Silala es un curso de agua internacional, Chile se aproximó a Bolivia para intentar alcanzar un acuerdo", pero no se logró, sostuvo.

También consideró que todas las demandas reconvencionales de Bolivia "han extendido innecesariamente la disputa" ante la Corte de La Haya porque, según en su criterio, "se basan en premisas falsas".

"Por lo tanto, deben ser desestimadas en su totalidad y los cambios en la posición de Bolivia (durante este juicio) y su retirada constante de sus alegatos escritos (iniciales) nos indican de alguna manera la ausencia de un diferendo e identifican la necesidad crítica de un fallo que explique y aplique el derecho internacional consuetudinario e introduzca claridad en las relaciones jurídicas entre las partes", agregó Fuentes.

En consecuencia, según la agente chilena, su país solicita a la Corte que "desestime" las tres contrademandas de Bolivia.

La presidenta de la CIJ, Joan Donoghue, respondió que tomará nota a este "alegato final de Chile respecto de las demandas reconvencionales de Bolivia".

"Con ello, concluye (esta fase). Deseo dar las gracias a los agentes, asesores y abogados de ambas partes por sus declaraciones, así como los peritos de las dos partes", añadió la jueza.

Además, Donoghue pidió a los agentes de ambas partes que permanezcan a disposición de la Corte para proporcionar cualquier información adicional que pudiera ser necesaria.

"Y, con esa salvedad, declaro clausuradas las actuaciones orales en relación con el diferendo sobre la condición y el uso de las aguas del Silala. La Corte ahora se retirará a deliberar y los agentes de las partes serán notificados a su debido tiempo acerca de la fecha en la que la Corte dictará su fallo", puntualizó.

La disputa por las aguas del Silala llegó hasta la CIJ después de que Chile presentara una demanda en 2016 para que ese recurso hídrico, que nace en manantiales del territorio boliviano, sea reconocido como un río de curso internacional, y dos años después Bolivia planteara una contrademanda.