Con la postergación hasta el 19 de abril fue declarado el diálogo entre el ministro de Salud, Jeyson Auza, y la dirigencia de los médicos. La negociación de las primeras cuatro horas estuvo centrada en la exigencia de anular la Ley de Emergencia Sanitaria, uno de los 16 puntos de un segundo pliego entregado y aceptado este viernes.

Auza informó en conferencia de prensa que la dirigencia de los médicos, a la cabeza de Luis Larrea, solicitó el cuarto intermedio en la negociación que se centró inicialmente en explicar –sostuvo- las razones del por qué no corresponde atender la demanda de anulación de la Ley de Emergencia Sanitaria.

"Esta Ley de Emergencia Sanitaria ha permitido el control de los precios, que en un momento eran un abuso para la población, se ha prohibido el hecho de que las personas tengan que presentar un depósito antes de ingresar a terapia intensiva; se ha establecido la prohibición de suspender los servicios de salud sin que esto signifique la posibilidad del derecho al reclamo, como lo han hecho hasta hora", explicó.

Larrea informó que requerirán datos al Ministerio de Salud para respaldar su demanda de anular la Ley de Emergencia Sanitaria.
"Hemos venido sin ánimo de presionar", aseguró.

Auza explicó que durante el cuarto intermedio hay el compromiso de los médicos de no realizar medidas de presión.

Los argumentos centrales de los galenos para exigir la anulación de la ley es, entre otros, que vulnera su derecho a la protesta en tanto que les impide suspender la atención de los servicios de salud mientras rija la declaratoria de una emergencia sanitaria, como ocurre ahora con la presencia de la pandemia por el COVID-19.

Los médicos suspendieron el "bloqueo de los 1.000 servicios" que estaba previsto para el martes, como inicio de una escalada de protestas, luego que recibieran la invitación a dialogar sobre sus demandas, entre ellas la de más ítems. El Gobierno informó la creación de más de 2.000 nuevos ítems para el sector