Áñez: 'Seré condenada como otras mujeres que han dado su vida contra las dictaduras'

A cinco días del inicio de su juicio oral por el caso Golpe de Estado II, la expresidenta Jeanine Áñez asegura que es "víctima de 'torquemadas' judiciales".

La expresidenta Jeanine Áñez dio por hecho este sábado que será condenada por el caso Golpe de Estado II, que investiga los supuestos actos irregulares cometidos en su proclamación como Jefa del Estado en la crisis de 2019, y cuyo comienzo de juicio oral está previsto para el próximo 10 de febrero.
"Yo denuncio ante la comunidad internacional, sus instituciones que velan por Justicia, derechos humanos y las democracias debilitadas por gobiernos totalitarios, déspotas y cómplices, que seré condenada como otras mujeres del mundo que han dado su vida contra las dictaduras", expresó Áñez a través de varios mensajes publicados en su cuenta oficial en Twitter, que es administrada por sus familiares desde que está encarcelada de manera preventiva.
La exautoridad afirmó que el 18 de enero uno de los jueces del tribunal, "designado de forma irregular, cumplió el pedido del Gobierno" de dictar apertura del juicio oral en su contra por asumir, según su versión, una "sucesión constitucional ante el vacío de poder provocado por las renuncias de Evo Morales y otros" en 2019.
Mientras "otro de los jueces rechazó por escrito la posibilidad de pronunciarse por la apertura del juicio oral (…) exponiendo las irregularidades existentes. El tercer juez no se pronunció. (Pero) sin respeto a la ley ni a procedimientos judiciales obedecen al poder político", agregó.
Por lo que, para el jueves 10 de febrero, a las 09.00, está previsto el inicio del juicio oral contra Áñez, quien considera que se están "violando todos sus derechos y garantías, obedeciendo al anuncio público del Gobierno sobre la duración del mismo y la condena anticipada". Sin embargo, "soy víctima de 'torquemadas' judiciales", remarcó.
El 10 de noviembre de 2019, el entonces presidente Evo Morales renunció a su cargo acorralado por denuncias de presunto fraude electoral, un motín policial y una "sugerencia" de las Fuerzas Armadas para que dimitiera.
Dos días después, asumió el mando del país la entonces segunda vicepresidenta del Senado, Jeanine Áñez, mediante un cuestionado proceso de transición en el que presuntamente no se respetaron reglamentos legislativos para inicialmente tomar la presidencia camaral y luego la jefatura del Estado.
Hecho que es calificado como un golpe de Estado y está siendo sustentado en el caso Golpe de Estado II.