Tras ser posesionado en el cargo, el ministro de Defensa, Edmundo Novillo, rechazó este lunes la formación de milicias armadas en el país, tal como planteó la semana pasada un dirigente afín al Movimiento Al Socialismo (MAS) para defender al gobierno del presidente Luis Arce.

La autoridad advirtió que no es posible aceptar una fuerza armada al margen de lo establecido por la Constitución Política del Estado.

"Debe respetarse la Constitución, el pueblo ha aprobado el año 2009 una nueva Constitución y está en ese marco las únicas fuerzas reconocidas legal y legítimamente, no existen, y no es posible, y no concibo de una fuerza irregular al margen de lo que establece la Constitución", declaró la autoridad a los periodistas.

El miércoles de la semana pasada, Simón Amaru, quien dijo ser representante de la Coordinadora Nacional de Defensa de la Democracia de la ciudad de El Alto, pidió al nuevo gobierno impulsar una reforma de la Carta Magna para conformar milicias armadas en el país. "Nosotros estamos yendo por la vía legal, por eso nosotros estamos pidiendo al nuevo gobierno una reforma parcial de la Constitución Política de Estado para la creación de milicias armadas y eso es estrictamente legal desde un marco jurídico constitucional", señaló.

El dirigente emitió ese pedido para defender al gobierno de Arce, debido a que Santa Cruz, según dijo, representaba un riesgo por la "convulsión" que estaba promoviendo al rechazar los resultados de las elecciones generales del 18 de octubre, en el que el MAS ganó con el 55,1% de los votos.

Novillo advirtió que no dará curso a ese pedido y que, por el contrario, trabajará para evitar enfrentamientos entre bolivianos,