El vocero presidencial, Jorge Richter, afirmó este lunes que la marcha, en defensa de la administración del presidente Luis Arce, "relegitima" el Gobierno y es una respuesta pacífica a las acciones de "ruptura", que supuestamente fueron protagonizadas por sectores "conservadores" del país durante los últimos dos meses a través de la declaratoria de distintos paros.
"La marcha tiene una significancia importante y una simbología mayor (porque) expresa el proceso de relegitimación del gobierno del presidente Luis Arce y del vicepresidente David Choquehuanca de los movimientos sociales en acción política preservando su proceso democrático y el Estado Plurinacional", dijo Richter en una entrevista con La Razón Radio.
Agregó que esta movilización "es una respuesta pacífica de un pueblo que se preocupa por lo que ha significado una ofensiva clara" en el país, que en su criterio, trató o aún "trata de abreviar los tiempos constitucionales", es decir, los cinco años de gestión del presidente Arce, que ganó las elecciones de octubre de 2020 con el 55,1% de los votos.
Sin embargo, según el funcionario, pese a ese resultado electoral, "los sectores conservadores siguen en una ofensiva frente a la democracia intercultural y al bloque social y popular, y por supuesto tratan de concluir, como ellos mismos han señalado, aquello que quedó irresuelto" tras la crisis de 2019.
Entonces, "en ese sentido, la marcha lo que está haciendo es relegitimar el Gobierno, establecer un control y una presencia territorial muy fuerte, y por supuesto dar una respuesta a todas las acciones de ruptura que existen en el país", insistió Richter.
La marcha en defensa del Gobierno comenzó el pasado martes en la localidad orureña de Caracollo liderada por el expresidente y jefe del Movimiento Al Socialismo (MAS), Evo Morales, y llega este lunes al centro de la ciudad de La Paz después de siete días de caminata continua.
Richter: La marcha 'relegitima' el Gobierno y es una respuesta pacífica a acciones de 'ruptura'
Según el vocero presidencial, los sectores conservadores siguen en una ofensiva frente a la democracia intercultural y al bloque social y popular.
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