La Defensoría pide respetar reserva en caso de la menor embarazada

La menor de 11 años quedó embarazada a consecuencia de una agresión sexual. La defensora del Pueblo, Nadia Cruz, explicó que la decisión de continuar o no con la gestación "es parte de la confidencialidad".

La Defensoría del Pueblo indicó este sábado que la niña de 11 años que quedó embarazada tras ser agredida sexualmente en Yapacaní se encuentra bajo protección y su situación y el lugar en el que se encuentra están resguardados por la confidencialidad y reserva del caso.

"El último reporte que me dieron ayer (viernes) es que ella se encontraba bien, con asistencia médica, psicológica, integral", indicó a La Razón la defensora del Pueblo, Nadia Cruz.

Cruz explicó que no revelará el sitio donde se encuentra la menor, para garantizar sus derechos.

"Le puedo asegurar que está bajo protección", se limitó a señalar.

El 4 de noviembre, el Ministerio de Salud informó que se había conformado un equipo médico multidisciplinario para abordar este caso. "Se informará a través de la autoridad competente para que, tanto la madre como la niña tomen una decisión de manera informada y en total libertad", explicó en un comunicado.

La decisión o no de continuar con la gestación generó diferentes reacciones. La Iglesia Católica se manifestó en contra de la interrupción y ofreció ayuda a la menor que llamó niña madre.

Organismos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) observó "que el embarazo de niñas y adolescentes víctimas de abuso sexual pone en riesgo su vida, salud física y mental, y afecta su autonomía integral."

La Organización de Naciones Unidas (ONU) Bolivia advirtió que someter a una niña a un embarazo forzado "está calificado como tortura".

Cruz aclaró que dar datos sobre la decisión de continuar o no con la gestación es algo que no debería ser informado públicamente. "Es parte de la confidencialidad", afirmó.