El general de Ejército Franco Suárez solicitó a la Fiscalía un careo con seis militares, entre ellos el excomandante del Ejército general Iván Inchauste, involucrados y testigos en el caso de la violencia y muerte de Senkata en 2019. La Fiscalía aceptó el pedido y fijará fecha.

Suárez planteó el careo o la confrontación de declaraciones contradictorias con Inchauste y el coronel Julio Tamayo, ambos en la cárcel, además del teniente coronel Kevin Soliz, el teniente coronel Alfredo Irrazabal, el mayor Eduardo Santiesteban y el teniente Junior Lizondo.

"Señor fiscal, de la lectura de las declaraciones informativas de los coimputados se puede advertir contradicciones y con la finalidad de que sus autoridades puedan tener claridad de cómo fue que sucedieron los hechos denunciados" solicito careo, establece parte del memorial al que tuvo acceso La Razón.

El general Suárez fue comandante de la División Mecanizada del Ejército, División que participó del operativo de desbloqueo y toma de la planta engarrafadora de Senkata que había sido cercada por vecinos y otros sectores afines al Movimiento Al Socialismo (MAS) en noviembre de 2019.

La comisión de fiscales aceptó el pedido de Suárez y quedó en fijar fecha y hora.

La Fiscalía lo acusó por los delitos de homicidio y lesiones graves y leves por el operativo que acabó con 10 muertos y decenas de heridos de bala. Una comisión formada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) calificó ese hecho de masacre.

A pocos días de la toma del poder por parte de Jeanine Áñez, se suscitó la masacre de Senkata y Sacaba, en Cochabamba.