Ribera exhorta a la CIDH pronunciarse sobre situación de la expresidenta Áñez

Carolina Ribera se encuentra en Estados Unidos. Dijo que hará conocer a diferentes organizaciones la situación de su madre, la expresidenta Jeanine Áñez

Carolina Ribera "exhortó" a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pronunciarse sobre la situación de la expresidenta Jeanine Áñez, su madre, quien se encuentra detenida desde marzo y con problemas de salud.
En la CIDH cursa un pedido de medidas cautelares en favor de la expresidenta. La viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, informó el martes que el organismo internacional amplió por al menos siete días más el plazo para que el Gobierno se pronuncie.

"Hija de Jeanine Áñez exhorta a la CIDH a pronunciarse. Intentar quitarse la vida demuestra daños psicológicos irreparables que requieren internación médica inmediata. Los tratos degradantes diarios la han llevado a este extremo. Qué espera la CIDH para pronunciarse?", reclamó a través de la cuenta en Twitter de Áñez, manejada por su familia.

Ribera informó, a través de su muro de Facebook, que se encuentra en Estados Unidos en "una ronda de reuniones con representantes de gobiernos, congresistas, organizaciones e instituciones internacionales de defensa de los DDHH alertando sobre el grave riesgo que corre la vida de mi madre, la Presidenta Constitucional".

Con una carta fecha el 31 de agosto, la CIDH dio un plazo de siete días al Gobierno para remitir información sobre las condiciones de salud, "tanto física como mental", de las medidas tomadas por el Ejecutivo y de las condiciones de detención.
Áñez se encuentra detenida desde marzo por el caso golpe de Estado y recientemente se amplió la denuncia penal por la toma de la presidencia del Senado sin respetar las normas y el Reglamento de Debates. La expresidenta atentó contra su vida, por lo que se alertó de un problema psicológico debido a las condiciones en la que se encuentra recluida.

Padece de hipertensión arterial que derivó en otras complicaciones. En la cárcel de Miraflores se le habilitó un ambiente para atender su salud, lo que provocó protestas por el resto de reclusos.