Presidente da luz verde al reinicio de operaciones de la Planta de Urea con el objetivo de garantizar la soberanía alimentaria


El presidente Luis Arce Catacora dio luz verde este lunes al reinicio de operaciones de la Planta de Amoniaco y Urea

(PAU) de Bulo Bulo, departamento de Cochabamba, con el objetivo de garantizar la
soberanía alimentaria del país, fortalecer la producción agropecuaria nacional para su
exportación a precios competitivos y consolidar la Hidrovía Ichilo-Mamoré.

"Es fundamental nuestra planta de urea para garantizar la seguridad alimentaria, reducir
costos de producción agropecuarios y tener una mayor capacidad y poder
competitivamente ingresar a los mercados internacionales. También esta planta de urea, y
así lo habíamos pensado en nuestro plan de gobierno, va a fortalecer la hidrovía IchiloMamoré
porque tenemos que llegar al norte cruceño, también al Beni y la exportación hacia
el Brasil porque tenemos un enorme potencial para exportación con esta planta", señaló en
un acto que se desarrolló en la población cochabambina.

El mandatario manifestó que el Gobierno nacional del proceso de cambio estaba empeñado
e impulsaba la industrialización del país en base a los recursos naturales existentes, pero
fue abruptamente interrumpido por el régimen de facto que cerró las operaciones de la
Planta de Urea, lo que ocasionó grandes pérdidas económicas al país.

"Esta planta, que hoy entra en funcionamiento nuevamente, es parte de la reconstrucción
de nuestra economía productiva. Y es muy simbólico estar en Bulo Bulo, en nuestra planta
de urea, viendo como vuelve a funcionar y producir. Nuestros productores agropecuarios
estaban pagando 833 dólares la tonelada de urea cuando en nuestro gobierno sólo costaba
400 dólares, es decir más del doble estaba pagando el agro", graficó el Jefe de Estado.

Arce hizo énfasis que a la derecha no le interesa el desarrollo del país y el beneficio de todos
los bolivianos porque utilizó el falso y temerario argumento de que la planta de urea
supuestamente estaba produciendo precursores para la elaboración de cocaína.
El régimen de facto, encabezado por Jeanine Áñez, paralizó la Planta de Amoniaco y Urea
en noviembre de 2019, que a la postre ocasionó un daño económico de más de $us 450
millones, el despido de 240 profesionales altamente especializados y la pérdida de
mercados que ya estaban consolidados.

Después del reinicio de operaciones, los administradores de la Planta de Amoniaco y Urea
tienen el desafío de recuperar los mercados de Brasil, Perú, Paraguay, Uruguay y Argentina
donde se exportaba el fertilizante antes de su cierre.

Estaban presentes en el acto, el ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina; el
gerente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Wilson Zelaya; el gerente de
industrialización la planta, Henry Lapaca; el presidente del Senado, Andrónico Rodríguez; el
gobernador del departamento de Cochabamba, Humberto Sánchez; el alcalde de Entre
Ríos, Elmer Rojas; el director de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), Germán
Jiménez; el expresidente del Estado, Evo Morales; autoridades nacionales,
departamentales, municipales y dirigentes de organizaciones sociales.