Los miembros del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) concluyeron este viernes su misión en Bolivia esperando que el Gobierno y la sociedad reconstruyan el quebrado tejido social con acciones como hacer justicia por las víctimas de 2019, superar el racismo y acordar límites a la protesta social para evitar nuevos hechos de sangre y violencia.
Patricia Tappatá y Marlon Weichert agradecieron a nombre del equipo de expertos la cooperación del gobierno y destacaron el compromiso asumido por la administración de Luis Arce de implementar las más de 30 recomendaciones emergentes de una investigación sobre los hechos de violencia y muerte de 2019.
El canciller Rogelio Mayta y el ministro de Justicia, Iván Lima, estuvieron en el acto que cerró el trabajo de los expertos que desde el martes hasta este viernes estuvieron presentando los resultados de su investigación en diferentes ciudades donde hubo conflictos. En Potosí y Santa Cruz hubo incidentes.
"Nosotros esperamos que algunas actividades fundamentales (se desarrollen), en concreto propusimos una cumbre sobre el tema del racismo que es un problema que atraviesa la totalidad de la realidad boliviana y el tema de la protesta, libertad de expresión y convivencia de visiones plurales ojalá sea también un tema para generar progresos y ponerse de acuerdo en cuáles son las maneras pacíficas y los límites de protestas como una forma legítima de obtener la solución a reclamos y a la vez como hacemos que no haya consecuencias letales ni pérdidas de vida", sostuvo Tappatá.
El informe fue trabajado en ocho meses y tiene más de 400 páginas en la que se refleja los hechos que pasaron entre septiembre y diciembre de 2019, antes, durante y después de la renuncia del expresidente Evo Morales. Los expertos calificaron de masacres la veintena de muertos por impactos de bala en Sacaba y Senkata. Plantearon reformas en la Policía, las Fuerzas Armadas, la Justicia y la Fiscalía.
"Hoy día, como sociedad y pueblo, estamos ante el reto de tener la madurez suficiente como para poder ver los errores históricos que hemos cometido y para tener la madurez de reconocer errores, superar esas situaciones, reencontrarnos como hermanos en medio de las diferencias y construir un futuro mejor", reflexionó Mayta y dijo que aún pervive el racismo.
Mientras que Weichert coincidió con Tappatá en que el desafío de implementar las recomendaciones queda en manos no solo del Gobierno sino de la sociedad para en lo macro superar el quiebre del entramado social que se dio en 2019.
"Reparación y proceso de Justicia", dijo, son los dos pilares sobre los que se debe trabajar hacia adelante.
Lima reafirmó el compromiso del gobierno de Arce de dar cumplimiento a las recomendaciones del GIEI, grupo que será disuelto tras concluir con su misión.
"Queremos demostrar que este es un país que tiene palabra y que la va a cumplir", afirmó en referencia a las recomendaciones y su implementación.
Además de Tappatá y Weichert, el equipo de expertos estuvo integrado por Juan Méndez, Julián Burger, Magdalena Correa y Jaime Vidal, responsable del grupo de expertos.
El GIEI deja Bolivia esperando se haga justicia y se supere el racismo
El grupo de expertos concluyó su misión con la entrega del informe en diferentes ciudades. El Gobierno se comprometió a cumplir con las recomendaciones
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