Presidente de Argentina plantea profundizar la unidad regional con organismos como la Celac


El presidente de Argentina, Alberto Fernández, planteó al Grupo de Puebla la necesidad de profundizar la unidad regional a través de instrumentos como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), en medio de duras críticas al secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, y a la gestión del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, por su accionar político con respecto a América Latina.

"Trump imponía su política sobre América Latina y eso explica muchas cosas que pasaron. Eso explica la OEA que tenemos, el Banco Interamericano de Desarrollo que tenemos, la división que tenemos. El nacimiento del Grupo de Lima, del Foro Prosur, todos (eran) mecanismos que servían a la política de Trump y no servían a la unidad de América Latina, ni al desarrollo ni al progreso de los latinoamericanos", reflexionó, de acuerdo con la edición digital del matutino argentino Página/12.

El mandatario del vecino país disertó sobre el tema, en forma virtual, en el encuentro por el segundo aniversario del Grupo de Puebla, que tuvo el denominativo de "Democracia, integración y justicia social en Latinoamérica".

Por otro lado, Fernández hizo un repaso de la situación del progresismo en Latinoamérica en años en los que perdió espacios en los gobiernos de la región, mientras ganaba terreno el "conservadurismo".

El jefe de Estado argentino llamó a fortalecer la institucionalidad del progresismo en América Latina y a alzar la voz en contra de los bloqueos económicos contra Cuba y Venezuela.

"La OEA tal como está no sirve", afirmó, y remarcó que "el primero que tiene que hacer su mea culpa es su secretario general, (Luis) Almagro, por la cantidad de cosas que ha hecho, y también la institucionalidad de los Estados Unidos por haber propuesto y sostenido a un hombre como Almagro".

Fernández consideró que "los años de Trump" hicieron que la OEA "no fuera un lugar de encuentro para América Latina", sino más bien "una suerte de escuadrón de gendarmería para avanzar sobre los gobiernos populares".
"Lo que ha hecho la OEA en Bolivia necesariamente debe ser investigado y necesariamente debe ser juzgado, porque ahora no caben dudas de lo que pasó", expresó, tras recordar cómo se impidió la consagración de Evo Morales en las elecciones generales de 2019 en Bolivia, y se consumó el golpe de Estado.

Con respecto al Grupo de Puebla, recordó que "aporta a un debate muy sustancioso" en el objetivo de "encontrar caminos alternativos" para que América Latina logre "salir adelante" y se saque el "triste estigma" de ser el continente "más desigual" del mundo.

"Las políticas de los últimos años profundizaron esa desigualdad y además vino la pandemia y quedó más en evidencia", planteó Fernández, quien reivindicó la "importancia del Estado" y el valor de darle sustento al carácter público de la salud y de la educación.

"Es imprescindible que la educación sea pública y gratuita para el progreso de nuestras sociedades", remarcó.
La pandemia, dijo, enseñó la trascendencia del Estado porque "es el mayor garante de la solidaridad" y graficó: "Si el Estado no arbitra y pone igualdad donde la igualdad no existe, ningún mercado promueve la igualdad".

El presidente argentino describió el contexto regional para renovar su certeza de que los países deben "unirse" para lograr mejores renegociaciones de sus "deudas", porque es un problema que impactará a nivel global.

"En el mundo de la pospandemia, el Fondo Monetario Internacional decidió disponer 50.000 millones de dólares para atender las necesidades de los países más pobres del mundo. A la Argentina de Macri le prestó 57.000 millones, eso me exime de todo comentario de explicar por qué el gobierno de Trump respaldó que el Fondo dé ese crédito", advirtió. "En nuestro país decimos que Trump pagó la campaña electoral más cara del mundo", ironizó.

En otro orden, planteó que América Latina tiene la "obligación moral" y el "deber ético" de alzarse frente a los bloqueos económicos que pesan sobre Cuba y Venezuela. "Los bloqueos deberían avergonzar a quienes los promueven y en América Latina hay dos bloqueos que se sostienen en medio de la pandemia, que privan a los pueblos ya no solo de alimentos, ya no solo de insumos para que la industria produzca, sino de insumos médicos, de respiradores y de lo elemental para hacer frente a la pandemia; humanitariamente nosotros no podemos quedarnos callados", expresó.

Por último, Fernández pidió poner en alto las "ideas, las convicciones" para llevar estos debates "a todas las sociedades" de la región.

"Ser progresista no es tampoco solo distribuir riqueza de un modo más igualitario; eso sí, pero también es garantizar la igualdad de género, terminar con cualquier tipo de discriminación, promover la unidad del continente en un tiempo en el que el mundo se regionaliza; todas esas son deudas que tenemos en nuestras sociedades", concluyó.