María Galindo, principal representante de Mujeres Creando, afirmó que "no sabe" si en el país hubo un fraude electoral en los comicios – anulados- del 2019, aunque sí reconoció que no había credibilidad en los resultados que finalmente dieron la victoria al entonces presidente que buscaba la reelección, Evo Morales.
"Como muchos bolivianos no sé si hubo fraude o no, pero sí puedo saber y sentir es que no había credibilidad en los resultados de las elecciones y por eso Evo Morales él mismo convocó a la auditoría de la OEA", aseveró en entrevista con el programa No Mentirás.
Consultada respecto a si en el país hubo un Golpe, Galindo señaló que sí, aunque, resaltó, el Gobierno ya atravesaba una crisis antes de las movilizaciones iniciadas a raíz de las elecciones.
"Creo que hubo golpe, pero no solo golpe", señaló.
Afirmó, en ese sentido, que el hecho de que la policía y las Fuerzas Armadas se hayan insubordinado determina que en el país hubo un golpe de Estado el 2019, en el sentido estricto del término dentro de las ciencias políticas.
"La insubordinación de la policía y las FFAA determinan conceptualmente sin lugar a dudas que trata de un golpe de estado", aseveró.
Además, señaló que el golpe también se demuestra en el hecho de que la nueva presidenta del Estado (Jeanine Añez) fue elegida en reuniones privadas, fuera de la Asamblea Legislativa y sin la participación de autoridades elegidas, en referencia a los asambleístas de ese momento.
No obstante, Galindo señaló que la crisis política del anterior Gobierno del MAS llegó mucho antes de las situaciones de noviembre, las cuales, dijo, ya eran "insostenibles.
"No solo golpe, porque cuando llegamos a ese punto era insostenible. Mucho antes hubo una crisis política que la que el MAS actuó con negligencia, con incapacidad de análisis de lo que estaba pasando e incapacidad de acción", aseveró.
El 2019, el Evo Morales se vio forzado a renunciar a la presidencia del Estado envuelto en denuncias de fraude, movilizaciones ciudadanas y tras perder el apoyo de la policía y las Fuierzas Armadas.
En su lugar asumió la presidencia del país Jeanine Añez – quien fungía como segunda vicepresidenta del Senado- en una cuestionada sucesión presidencial.