A Bolivia se le acabó la suerte

La Verde sólo sabe defenderse. Atacó dos veces durante los 90 minutos, anoche.

No hay suerte que dure para siempre. Bolivia volvió a su realidad y perdió anoche por 3-1 frente a Paraguay, en su debut en la Copa América. La receta de defenderse le resultó al equipo que dirige César Farías en dos partidos, pero en el tercer choque los paraguayos se encargaron de desnudar las falencias del combinado nacional.

La Albirroja hizo el gasto durante los primeros 45 minutos y la Verde anotó. Tal como pasó hace una semana en Santiago, la Selección tuvo otra vez la fortuna de su lado porque el rival fue más en la cancha, pero careció de efectividad para poder abrir el marcador.

Bolivia tuvo una oportunidad sobre los cuatro minutos y la volea de Diego Bejarano pegó en la mano de Arzamendia y el juez Diego Haro, con la ayuda del VAR, cobró la pena máxima que fue convertida por Erwin Saavedra en el minuto nueve.

Con la ventaja a su favor, el seleccionado boliviano decidió defender el gol que tenía a su favor y lo hizo muy atrás, arrinconado en su área chica.

En el minuto 18, el árbitro cobró penal en contra de Bolivia, pero el VAR anuló la jugada, ya que antes había un fuera de juego de un delantero guaraní.

Así transcurrió toda esta etapa con la Verde defendiendo como se podía el gol a favor y con Paraguay que no encontraba el camino, pese al dominio.

Jaume Cuéllar, del equipo boliviano, fue expulsado por doble amarilla en el tiempo de adición. La suerte no podía estar siempre del lado de Bolivia. Con todo el segundo tiempo por jugar y con un hombre menos, no fue lo más prudente seguir defendiendo el 1-0 a favor, había que salir a proponer otro juego, pero la Selección no tenía la mínima idea de hacer otro juego.


En cuatro minutos los paraguayos dieron la vuelta el marcador: primero con un soberbio remate de Alejandro Romero desde fuera del área chica (16') y cuatro minutos después Ángel Romero aprovechó un mal despeje del golero Rubén Cordano para marcar el segundo y a otra cosa.

Los paraguayos liquidaron el encuentro en el minuto 35 con otro tanto de Ángel Romero ante una Selección boliviana que estaba rendida y a la que se le terminó la suerte.