El sábado el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, anunció que solicitarán al Gobierno de Ecuador colaboración para investigar lo que ocurrió en 2019 con el envío de granadas de gas y proyectiles a Bolivia desde ese país. Ayer, el jefe de su partido, Evo Morales, demandó una "investigación a fondo" contra el expresidente ecuatoriano Lenín Moreno.

Los pronunciamientos se dieron luego de que Del Castillo informara el viernes que el 16 de noviembre de ese año el gobierno de la entonces presidenta Jeanine Añez solicitó ese envío (con carácter de cooperación), que gestionó la entonces ministra de Comunicación Roxana Lizarraga, y que luego se lo mantuvo en reserva.

El 16 de julio de 2020, durante una entrevista con el periodista Carlos Valverde, el entonces ministro de Gobierno, Arturo Murillo, contó que en la gestión de Añez se tuvo que acudir al préstamos de los gases de un gobierno amigo debido a que la gestión del MAS había dejado desabastecida a la Policía Boliviana en un momento de conflicto.

El pasado sábado 5 de junio, en una entrevista en el programa Asuntos Centrales, Lizárraga dijo que ella fue quien realizó esa gestión, aunque no reveló el nombre del Gobierno.

Ayer, Morales acusó a Moreno de complicidad con el que considera golpe de Estado de 2019, por haber realizado el envío de ese equipamiento antimotines.

"El presidente Lenín Moreno, en otras palabras, ha participado en el golpe de Estado mediante las masacres. Creo que profundamente debe ser investigado Lenín Moreno, al facilitar equipos o armamento de represión para Bolivia", demandó.


El sábado, el ministro Del Castillo comparó este préstamo de gases y proyectiles con la forma en que operaban los gobiernos dictatoriales en los 70 con el denominado Plan Cóndor.