Ante la aparición de la variante P1 de COVID-19 en Brasil, el Gobierno cree que no es conveniente cerrar las fronteras con ese país, en coincidencia con tres de los municipios de la región, que advierten que la medida afectará a su economía.
"Inicialmente, lo que tenemos que tratar de preservar es la actividad económica, por un lado; por otro, que no cunda el pánico, al estrés que ya tenemos, por el desarrollo de la pandemia; no queremos agravar con noticias que puedan preocupar innecesariamente", dijo el canciller Rogelio Mayta en entrevista con La Razón.
Adelantó que el Ministerio de Salud evaluará el comportamiento de la pandemia antes de tomar una decisión sobre las fronteras.
A esa posición se suman los alcaldes de Riberalta, Guayaramerín y Puerto Quijarro, que se vieron obligados a reforzar las medidas de bioseguridad, y advierten que cerrar las fronteras es complicado por el flujo comercial.
"No tenemos la potestad para cerrar las fronteras, lo tendría que hacer la Cancillería del Estado (…); sería lo mejor (cerrar la frontera), pero lamentablemente Guayaramerín vive del comercio, no tenemos otra fuente de ingreso", explicó a este diario la alcaldesa de Guayaramerín, Helen Goyareb.
Detalló que por el momento, esa región realiza un control sanitario y limita la circulación de personas de 05.00 a 16.30, de lunes a viernes, y de 05.00 a 18.00, en sábado, durante 15 días. Los domingos hay confinamiento total.
En tanto, el municipio de Riberalta se encuentra encapsulado y permite el tránsito de personas de 05.00 a 22.00 de lunes a sábado, y los domingos están restringidas todas las actividades. El alcalde, Willy Endara, pidió a la Cancillería realizar un estudio antes de decidir el cierre de fronteras.
"Se debe ver el cierre o reforzar las medidas de bioseguridad, porque a nosotros los riberalteños y a la provincia Vaca Díez el que nos provee de alimentos es el vecino país, Brasil", explicó.
El alcalde de Puerto Quijarro (Santa Cruz), Ivar Antelo, dijo al diario La Razón que cerrar las fronteras afectaría a esa y otras regiones vecinas. "Es difícil cerrar la frontera; para nosotros que vivimos acá del comercio fronterizo, es medio complicado", subrayó.
El Gobierno envió brigadas, insumos y medicamentos a la zona.
Municipios y Gobierno consideran que no es conveniente cerrar fronteras
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