El director de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, reconoció que en Bolivia hubo un golpe de Estado el 2019 debido a la insubordinación de militares de las Fuerzas Armadas que sugirieron al presidente Evo Morales que renuncie a su cargo.
"Si bien no le colocaron una pistola al pecho, que la cabeza de las Fuerzas Armadas le diga 'usted más bien renuncie a su cargo porque ya no estamos subordinados a su autoridad', técnicamente se constituye en golpe de Estado", manifestó en una entrevista con el canal de televisión internacional CNN.
Vivanco manifestó que la renuncia de Morales fue motivada "yo diría hasta coaccionada por la autoridad militar, por lo que lo sucedido debe ser investigado en el marco de la transparencia y credibilidad", agregó.
Morales fue derrocado por un golpe de Estado en noviembre de 2019, en medio de denuncias, nunca comprobadas, de fraude electoral en las elecciones presidenciales, celebradas el 20 de octubre.
Jeanine Áñez asumió el cargo como gobernante de facto y, en los días posteriores, firmó un decreto que eximía de responsabilidad penal a los militares encargados de "restablecer el orden" en las protestas.