La aeronave Boeing 767 de la aerolínea estatal Boliviana de Aviación (BOA) aterrizó este jueves en horas de la mañana en el aeropuerto internacional de Pekín, República Popular de China, para cargar cerca de 23 toneladas de medicamentos para el tratamiento del coronavirus. Se espera su arribo al país, el viernes al finalizar la tarde.

"Informamos que hemos negociado y suscrito contratos con la empresa China #MEHECOGroup para la provisión directa de medicamentos para combatir el COVID-19. En las próximas horas una nave de BOA arribará con 22.979 kg. de fármacos para el pueblo boliviano", confirmó el ministro de Relaciones Exteriores, Rogelio Mayta a través de su cuenta en Twitter.

El avión de BOA que envió el Gobierno aterrizó este jueves en Pekín a las 10:49 hora boliviana. Se trata del segundo aterrizaje en territorio chino, el primero se realizó el martes, cuando se cargó medio millón de vacunas de Sinopharm.

Ese primer vuelo llegó al país en horas de la mañana del miércoles con los reactivos requeridos y hasta mediodía se procedió a la descarga completa, el llenado de combustible y el mantenimiento de la aeronave, para su retorno a China en busca de las toneladas de medicamentos.

Por su parte, el viceministro de Comercio Exterior e Integración, Benjamín Blanco, confirmó a través de sus redes sociales que el vuelo llegará a Cochabamba, "Mañana arribará a #CBBA, desde #Beijing, el vuelo OB9791 de @BoABolivia con más de 1,2 Millones de dosis de 8 fármacos para tratar casos graves de COVID-19, negociaciones directas con #MEHECOGroup. Garantizando el derecho a la salud".

El viceministro dijo que la negociación directa beneficia al país con un ahorro de hasta 10 veces el precio por ser una compra en grandes cantidades con el fin de que duren y se tenga a disponibilidad de la población.

Los medicamentos serán distribuidos a todo el país a través de los servicios departamentales de salud dependientes de las gobernaciones.

Asimismo, el gerente de BOA, Ronald Casso, destacó que el traslado de las vacunas de China a suelo boliviano, fue realizado en un tiempo record, y por primera vez se llegó a ese territorio en el marco de los esfuerzos estatales para la lucha contra el avance de la pandemia.