Sandra Ríos Villlarte, enfermera de la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) del Hospital Japonés en Santa Cruz, fue la primera boliviana en recibir la vacuna rusa Sputnik-V.

"Ya puedo respirar tranquila, muchas gracias. La verdad me siento bien no he tenido ningún efecto; es más, me han controlado los signos, estoy con signos vitales como de una quinceañera… Gracias estoy muy emocionada, lo hemos logrado", expresó Ríos tras recibir su carnet de vacunación de las manos del mandatario.

El presidente Luis Arce manifestó este viernes que con este primer lote de vacunas inicia otra de las etapas de lucha contra el coronavirus (Covid-19) por lo que ya se puede hablar de una solución estructural y "ya no es un aguante".

"Y así de manera conjunta, todos unidos en esta tarea de lucha contra el Covid-19 vamos a lograr salir adelante. Y lo estamos haciendo, hay una esperanza, lo han dicho ustedes, hay una luz al final del túnel, por fin. Esta es una solución estructural, ya no es un paliativo, ya no es un defensivo, ya no es un aguante, ya no es una resistencia", expresó Arce.

En la oportunidad, el jefe de Estado manifestó se inició con la inoculación en Santa Cruz porque es uno de los departamentos donde particularmente el problema es más agudo; pero, aclaró que las vacunas llegarán a todo el país.

Aseveró que no se abandonó al personal médico durante esta segunda ola de la pandemia, ya que se convirtió en un trabajo conjunto entre el gobierno central, gobernaciones y municipios el hacer frente a la pandemia.

Asimismo, manifestó que el Gobierno nacional no envió a los médicos a la batalla contra el virus sin armas, ya que una de las primeras medidas que se adoptó fueron la aplicación de las pruebas rápidas para detectar de manera temprana a los enfermos y esa medida se deberá seguir aplicando hasta inmunizar al 100% de la población.

Las primeras 4.400 dosis fueron dejadas en el departamento de Santa Cruz, primeramente, para inmunizar al personal médico que se encuentra en primera línea en la lucha contra el coronavirus.

En el Hospital Japonés en Santa Cruz se aplicaron las primeras 10 dosis de la vacuna Sputnik-V. Uno de los primeros requisitos que cumplieron fue la nominación en la que el beneficiario brindó todos sus datos personales y su consentimiento para recibir la vacuna.

Después el personal médico procedió a aplicar la dosis y como una tercera etapa el paciente pasó a la fase del monitoreo en la que esperó alrededor de 15 a 30 minutos para ver si no presentaba una reacción adversa..

A cada paciente se le administró una cantidad de 0,5 ml de la vacuna de forma intramuscular que sería una primera dosis y en el lapso de 21 días, las mismas personas que fueron beneficiadas, deberán completar con una segunda inyección.