Antes de iniciar su labor como observador de las elecciones en México, desde donde participó en su programa dominical de Radio Kawsachun Coca, el jefe del MAS, Evo Morales, denunció presuntas amenazas de muerte y acciones de intimidación por parte del Gobierno a través de instituciones uniformadas.
Morales señaló a Erick Holguín, actual comandante de la Policía en Santa Cruz, de haber mencionado a un grupo de jefes y oficiales de ese departamento que habría que matar o mínimamente encarcelar al senador evista Leonardo Loza y a su persona en venganza por no ascender hasta el momento al grado de general de la Policía Boliviana.
"Tengo información de que el coronel Erick (Holguín) dijo: Si no matamos a Loza y Evo, por lo menos vamos a meterlos a la cárcel", sostuvo Morales desde capital azteca y recordó que el ascenso de Holguín no se concreta por su comportamiento violento expresado en un incidente con el excapitán Edman Lara, el año pasado.
"Había decidido matarnos por no haber ascendido a general", complementó Morales.
Eso no es todo, antes de mencionar a Holguín y sus supuestas pretensiones, dijo que el lunes 27 de mayo, alrededor de las 22:00 un helicóptero sobrevoló a baja altura su domicilio en Villa Tunari, trópico de Cochabamba, lo que causó temor entre sus vecinos.
Morales dijo que no es la primera vez que sufre ese tipo de intentos de amedentamiento. Mencionó que su casa es vigilada con drones y helicópteros, pero en el día. "Primera vez que ocurre en la noche", sostuvo el caudillo, principal adversario político del actual gobierno.
En ese sentido, Morales advirtió que si se produce algún atentado contra la vida del senador Loza y la suya, los responsables serán el presidnete Luis Arce y el vicepresidente David Choquehuanca.