Este martes se conoció del rechazo de la denuncia formulada por Juan Evo Morales Ayma en contra de Luis Marcelo Arce Mosqueira, hijo del presidente Luis Arce Catacora, por la presunta comisión del delito de tráfico de influencias, según informaron fuentes de la Fiscalía a la red Unitel.
El revés judicial es duro y está siendo procesado por Morales y el equipo jurídico que lo acompaña. De hecho, hasta el cierre de esta nota informativa, el jefe del MAS no reaccionó a través de sus redes sociales, pese a que es bastante dinámico con sus post y mensajes en X y Facebook.
Morales presentó hace unas semana un audio como indicio de que Marcelo Arce tenía vínculos con negocios ligados a recursos naturales administrados por el Estado, sobre todo del litio. En ese momento, él y sus seguidores hablaron de «negocios familiares» con materias primas de demanda global.
Morales incluso posteó dicho audio en sus redes sociales en donde señaló que "dicen que no hay que meter a la familia en política, más bien deberían cuidar de que la familia no se meta con el patrimonio del pueblo boliviano, en una cuestión de Estado".
Desde el Gobierno de Luis Arce, surgieron diversas voces, entre ellas del ministro de Hidrocarburos, Franklin Molina, que aseguraban que desde la actual administración del Estado se está trabajando en la industrialización del litio con transparencia y que las denuncias de Morales solo buscaban un desgaste con tintes políticos.
La ministra de Trabajo, Verónica Navia, pidió también en su momento que se presenten las pruebas en este caso en el que, aseguró, el presidente "Luis Arce es el más interesado que se investigue porque sabemos que no hay pruebas contra él (su hijo)".