Es una vergüenza que un periodista que denunció engaños de un Estado hacia otro sea arrestado, condenado a morir en prisión y no hagamos nada para liberarlo. Es una locura, comentó el mandatario del gigante suramericano, citado aquí por el periódico The Independent.
Hablamos de libertad de expresión. El hombre esta en la cárcel porque denunció actos indebidos y la prensa no hace nada en defensa de este periodista, espetó Lula da Silva, en clara referencia a los dobles raseros utilizados por Occidente en este caso específico.
Aunque afirmó haber olvidado abordar el tema de Assange en su encuentro con el primer ministro británico, Rishi Sunak, el jefe de Estado brasileño prometió hacerlo en una carta al regreso a su país.
La víspera, en coincidencia con la coronación, Assange quien en abril de 2019 fue sacado a la fuerza de la embajada de Ecuador, donde se encontraba bajo protección del gobierno de ese país, para ser encarcelado en la prisión británica de Belmash, escribió una misiva al monarca.
Le imploro, rey Carlos III, que visite la prisión de Su Majestad en Belmarsh, porque es un honor digno de un rey, señaló el periodista australiano, quien en su momento publicó miles de documentos sobre acciones secretas de Estados Unidos y de otras potencias occidentales.
"En la coronación de mi señor, pensé que sería apropiado extenderle una cordial invitación para conmemorar esta trascendental ocasión visitando su propio reino dentro de un reino: la Prisión de Su Majestad en Belmarsh", destaca Assange.
Además, el fundador de WikiLeaks consta que en la mencionada prisión se encuentran recluidos 687 de los súbditos leales del rey, lo que respalda el récord del Reino Unido como la nación con la población carcelaria más grande de Europa Occidental, constató.
En 2019, el gobierno del entonces presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, retiró la protección de Assange en la embajada de ese país en esta capital, donde permanecía desde julio de 2012.