Flanqueado por una crisis mundial producto de la guerra entre Rusia y Ucrania y por una serie de cuestionamientos y ataques internos que generan incertidumbre, el Gobierno espera la aprobación de siete créditos por $us 779 millones, que le darían alivio al momento actual.

«En la presente gestión se han aprobado cinco contratos de préstamo en la Asamblea, por un total de 705,8 millones de dólares aproximadamente, y tenemos pendientes otros siete contratos hasta el momento por un equivalente de 779,2 millones de dólares», dijo este domingo el ministro de Planificación del Desarrollo, Sergio Cusicanqui.

En entrevista con Bolivia TV, Cusicanqui informó que el Gobierno nacional accedió a 12 contratos de crédito por $us 1.485 millones para proyectos de inversión pública, lo que demuestra la confianza de organismos y acreedores internacionales en la economía boliviana.

En las últimas semanas, dos calificadoras de riesgo y un banco internacional bajaron la calificación de Bolivia, pues consideran que sus políticas de cambio fijo en la moneda y de subvenciones ya no funcionan.

Las críticas devienen de un alto incremento en los costos de la importación y subvención de combustibles y la falta de dólares en el mercado financiero.

En reiteradas ocasiones, el Gobierno respondió a estas críticas y dijo que estas calificadoras no tomas en cuenta otros indicadores también importantes, como el crecimiento, la baja inflación, entre otros, y aseguró que no levantará ni las subvenciones ni el tipo de cambio.

Cusicanqui volvió a rechazar estas críticas y dijo que la mejor muestra de la confianza internacional en el país, es que aún tiene acceso al crédito. En este contexto y tal como establece la Constitución Política del Estado, pidió la aprobación inmediata de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP).

«Es una muestra de confianza para continuar llevando adelante inversión pública y proyectos específicos», insistió.

«Esperamos que puedan ser tratados a la brevedad, porque al final son recursos que van a ser destinados a proyectos específicos de inversión pública o en su caso van a fortalecer la situación de la economía boliviana», remarcó.

Estos recursos también darían un respiro a la falta de dólares en el país y ayudarían a reforzar las Reservas Internacionales Netas (RIN).

Proyectos

Hasta el momento fueron aprobados en Diputados, por ejemplo, los proyectos carreteros Botijlaja – Caquiaviri, La Joya – Chuquichambi, la doble vía Oruro – Challapata y el Programa Multisectorial de Preinversión.

En tanto el «Proyecto de apoyo a poblaciones vulnerables afectadas por el coronavirus» y la construcción y ampliación del hospital de tercer nivel de la ciudad de Oruro se encuentran en tratamiento en la Comisión de Diputados.

«Esperamos que pueda ser también tratado y aprobado en la Cámara de Diputados (…) para que a la brevedad posible los ejecutores de cada uno de estos créditos puedan empezar la ejecución de los recursos», agregó.

De acuerdo con los datos oficiales y según un reporte de ABI, Bolivia tiene acceso al financiamiento de entidades como la Corporación Andina de Fomento (CAF) o Banco de Desarrollo de América Latina, la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA), entre otros.

El 5 de abril, el Ministerio de Planificación del Desarrollo envió al Legislativo dos proyectos de inversión pública por $us 160 millones.

El primer proyecto es de $us 115 millones, a 15 años plazo, de JICA, para «mejoras de políticas e instituciones que permitan continuar y reforzar los servicios públicos del sector salud», reportó ABI.

El segundo tiene que ver con el «Programa de construcción de puentes y sus accesos», tiene un financiamiento de hasta $us 45 millones de la Corporación Andina de Fomento.