La Policía boliviana formalizó la denuncia en contra de la dirigencia del Magisterio Urbano por presunta agresión a uniformados, informó director de la Fuerza Especial Contra el Crimen (FELCC), Rolando Rojas.

"Se formaliza la denuncia por este hecho, siendo que habían sido víctimas (tres policías) de petardos en las manifestaciones del sector del magisterio urbano el día de ayer (jueves)", dijo Rojas en contacto con La Razón.

El jueves, el Magisterio Urbano protagonizó una nueva movilización en las calles de La Paz. Según denuncias del Ministerio de Educación, los maestros portaban petardos de "alto impacto" y producto de enfrentamientos con la policía, tres uniformados resultaron heridos.

Rojas, al respecto, afirmó dos policías varones y una mujer resultaron heridos por quemaduras de los petardos de alto impacto que fueron lanzados en su contra de forma directa por parte de los movilizados.

Los maestros mantienen sus medidas de presión, principalmente, en demanda de cinco temas referidos a: presupuesto para la educación; la suspensión de la implementación del currículo educativo; ítems de nueva creación; déficit histórico y realización del Congreso Educativo.

El Director de la FELCC, en ese sentido, afirmó que el sector del Magisterio está en su derecho a la protesta; sin embargo, repudió que ésta sea violenta, con uso de artefactos explosivos de alto impacto que afectan directamente a la humanidad de los efectivos.

Por su parte, los maestros urbanos denunciaron extremos de parte de la Policía durante la represión. El dirigente de Federación de Maestros de La Paz José Luis Álvarez informó en radio Panamericana que desde que se iniciaron las movilizaciones se ha registrado más de 100 profesores heridos y que la mayor parte es a causa del impacto de los balines, que, en su criterio, son disparados "a quemarropa en la cara, con intención de matar" por los policías.

Calificó de "circo" el accionar de la Policía y dijo que las verdaderas víctimas son los maestros. Asimismo, negó que los movilizados utilicen los petardos para dañar a los efectivos, sino que lo hacen para defenderse.