En la Organización de Estados Americanos (OEA), el embajador Héctor Arce planteó, siempre que Perú lo consienta, que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) considere formar un Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) para investigar los hechos ocurridos en la crisis peruana con la finalidad de que prevalezca "la memoria, la verdad y la justicia".

Arce hizo el planteamiento en la sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA que aprobó una Declaración por unanimidad en defensa de los Derechos Humanos en Perú, donde se desató una crisis política-social que hasta el momento se cobró la vida de más de 50 personas de diferentes sectores sociales movilizados.
"Bolivia, respetuosamente sugiere que bajo la expresa aquiescencia de la República del Perú, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos CIDH, considere conformar, con el financiamiento adecuado, un Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes, para que en un futuro próximo, los hechos ocurridos en la hermana República del Perú, sean investigados a profundidad, no solo internamente, sino por una instancia internacional e independiente asegurándose así la prevalencia de la memoria, la verdad y la justicia", propuso.
El embajador aseguró que el gobierno de presidente Luis Arce es respetuoso de la autodeterminación de los pueblos y del principio de no injerencia en asuntos internos de otro Estado, no obstante, explicó que "no podemos quedar indiferentes ante la violación de Derechos Humanos y sobre todo ante la violación del Derecho a la Vida de personas humildes, de hermanos indígenas, campesinos, de gente sencilla que merece al igual que todos los habitantes de una sociedad organizada, respeto y valoración".
La propuesta de constituir un GIEI en Perú se apoya en la experiencia boliviana, donde un grupo de expertos independientes, justamente, investigó los hechos de violencia y muerte ocurridos antes, durante y después de la crisis y el golpe de Estado de 2019. El informe final estableció, entre otras conclusiones, que hubo masacres e hizo 36 recomendaciones.
"La experiencia de los grupos interdisciplinarios e independientes en materia de Derechos Humanos, cuando menos en el caso boliviano dieron buenos resultados, nomás la semana pasada la CIDH, visitó Bolivia para hacer seguimiento a las recomendaciones emitidas", explicó Arce en el foro internacional en alusión a la última visita de una misión de la CIDH presidida por Joel Hernández.
En la declaración sobre Perú, la OEA hace "su firme llamado a las autoridades peruanas para que aseguren la gobernabilidad e institucionalidad democrática mediante la pronta realización de elecciones generales justas, libres y transparentes, con observación electoral internacional", además convocó a "garantizar la integridad y el debido proceso para todas las personas, especialmente las personas afectadas, en un marco de respeto al Estado de Derecho".
Arce expresó que "duele profundamente lo que ocurre en un país vecino, no solamente por la identidad indígena y cultural de nuestros pueblos, sino porque aún está fresca en la memoria de la Nación boliviana la tragedia que significó las sendas violaciones a los Derechos Humanos y las masacres que vivimos el año 2019, en el último golpe de estado que vivimos lamentablemente en las Américas".
Más de una veintena de muertos y decenas de heridos dejaron en Bolivia las masacres en Sacaba y Senkata durante el gobierno de facto de Jeanine Áñez. Fuerza combinadas de la Policía y de las Fuerzas Armada intervinieron protestas sociales amparados en un decreto que les eximía de responsabilidad penal por sus acciones.