El presidente del Estado, Luis Arce, aseguró este domingo que el pueblo boliviano no permitirá un nuevo atentado contra la democracia, luego de recibir el respaldo de diversos sectores sociales del departamento de Santa Cruz y del resto del país.

"Este es el pueblo boliviano que quiere trabajar y seguir construyendo una Patria digna y soberana, y le dice a la derecha que no permitirá un nuevo atentado contra la democracia", destacó en sus redes sociales, para agradecer el respaldo de las organizaciones sociales del municipio cruceño El Torno.

A través de un pronunciamiento público, las organizaciones sociales de El Torno ratificaron su "pleno y contúndete respaldo y apoyo unánime orgánico y político" al presidente Arce y vicepresidente David Choquehuanca.

En el documento, las poblaciones alertan que las protestas generadas desde la oposición, y principalmente originadas en Santa Cruz, no son una casualidad porque obedecen a un plan de convulsión social y político para dañar la economía, generar crisis política, para finalmente derrocar al Gobierno legítimamente elegido con más del 55% de los votos del pueblo en las urnas, en octubre de 2020.

Recuerdan las ocasiones en las que la derecha originó intentonas golpistas en el país en el gobierno de Arce Catacora, como el paro indefinido que pedía la abrogación de la Ley Contra las Ganancias Ilícitas; el ocultamiento del maíz en abril de 2022, con la intención de sembrar la idea en la población de escases; el paro indefinido por el Censo; y hoy las protestas por la aprehensión de Luis Fernando Camacho por el caso Golpe I, que no son pacíficas.

"Este sistemático plan de desestabilización es parte de una receta que viene desde afuera, que les dio resultado en el año 2019 con el golpe de Estado y el derrocamiento del Gobierno a la cabeza del hermano Evo Morales Ayma, y recientemente en diciembre del pasado año el derrocamiento de su mandato al presidente Pedro Castillo Terrones de la hermana república del Perú. En el plan todo apunta al derrocamiento del Presidente Luis Arce Catacora", advierten.

En ese contexto, afirman que la detención del exlíder cívico "en absoluto no se trata de persecución política, sino de justicia por su participación como uno de los principales actores del golpe de 2019 y posterior masacres".

Piden a los administradores de la justicia cumplir con su deber constitucional y las leyes del Estado Plurinacional y hacer justicia por los caídos por la Guerra del gas en 2003 y las masacres de Senkata, Sacaba, Betanzos, el Pedregal y Montero. Castigar a todos los autores materiales e intelectuales de acuerdo a el grado de participación en el golpe de 2019 y de los 38 fallecidos.

Asimismo, denuncian ante el pueblo boliviano y a nivel internacional "la tergiversación y el implantamiento del plan de la mentira" que montan las grandes cadenas internacionales, nacionales, locales de información para favorecer el discurso de la derecha.