Como había advertido, el Colegio Médico de Bolivia confirmó que este martes 8 de noviembre se sumará a las medidas de presión con un paro de actividades. El sector denuncia problemas en Santa Cruz para el sector salud y expresó su apoyo a las movilizaciones que piden que el Censo se realice en 2023.

"Por decisión de consenso pleno, emanado de la totalidad de los presidentes de los colegios de profesionales en salud, los nueve presidentes de los colegios médicos departamentales, secretarios ejecutivos de federaciones, Caja Nacional de Salud, Caja Petrolera de Salud, Federación de Sindicatos de Ramas Médicas de Salud Pública de Bolivia, instruye a sus miembros colegiados y afiliados de base de manera obligatoria el paro programado a partir de las cero horas del día martes 8 de noviembre de 2022", indicó el secretario general del Colegio Médico, Freddy Fernández.

La determinación fue tomada en una reunión ampliada del Comité Nacional de Salud (Conasa), que aglutina a los médicos, así como profesionales sanitarios de otros rubros. No se descarta radicalizar sus medidas.

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"Decisión asumida en la exigencia de respeto a la vida, democracia, apoyo al pueblo cruceño y la realización del consenso por el futuro de Bolivia. Se exige militante cumplimiento", aseveró.

Mientras dure la medida de presión, el instructivo es reforzar los servicios de emergencia. En tanto, el resto deberá parar sus actividades como apoyo al paro de sectores de Santa Cruz, que exigen que el Censo de Población y Vivienda sea en 2023.

PARO MÉDICO
Ya el jueves, el presidente del Colegio Médico de Bolivia, Luis Larrea, había advertido con esta medida de presión. El ministro de Salud, Jeyson Auza, consideró que se buscaban "pretextos" y calificó a Larrea como "enemigo número uno de la salud".

"(Larrea) busca cualquier pretexto para sumar al sector salud a los movimientos políticos encabezados por Luis Fernando Camacho y otros grupos radicales de extrema derecha. Tenemos que decirlo, Larrea es el enemigo número uno de la salud pública en Bolivia. Todo el tiempo está buscando pretextos para impulsar al sector salud a dejar sin atención médica al pueblo boliviano", indicó el jueves el ministro.

La autoridad felicitó a los profesionales en salud que cumplen con su labor en Santa Cruz, pese al paro y se advirtió con sanciones a quienes no lo hagan y suspendan los servicios. Fernández le restó importancia a esta decisión.

"Los profesionales en salud estamos conscientes de la determinación que se está tomando. Se ha mencionado que es preferible ser descontados de un día de trabajo, que vivir sin respeto a la democracia y los derechos constitucionales de las personas", afirmó el dirigente.

Fernández apuntó a los movilizados en contra del paro como responsables de impedir el normal funcionamiento de los servicios de salud; Auza indicó que quienes perjudican aquello son quienes apoyan que el Censo sea en 2023.

El paro médico está por ahora confirmado y podría radicalizarse. No obstante, si el diálogo entre el Gobierno y autoridades subnacionales sobre el Censo prospera, la medida se suspenderá.